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XEROX PARC: EL LABORATORIO QUE INVENTÓ EL FUTURO

September 27, 2025

Orígenes de un laboratorio visionario

En la década de 1970, Xerox, conocida por sus fotocopiadoras, enfrentaba un temor existencial: ¿qué pasaría si el papel, pilar de su negocio, dejaba de ser relevante en las oficinas? Esta preocupación llevó a la creación de un laboratorio único en Palo Alto, California, lejos de la sede central en Nueva York. El Xerox Palo Alto Research Center (PARC) nació en 1970 como un espacio de libertad creativa, donde se contrataron mentes brillantes provenientes de proyectos militares, universidades de élite y la incipiente escena tecnológica. Investigadores imaginaron el futuro con un enfoque sin restricciones, sentando las bases para la informática moderna. Este ambiente, relajado pero ambicioso, permitió a figuras como Alan Kay, Adele Goldberg, Butler Lampson, Bob Metcalfe, Larry Tesler y Gary Starkweather redefinir la tecnología.

El Xerox Alto: La primera computadora personal

En 1973, Xerox PARC presentó el Xerox Alto, una máquina que marcó un antes y un después en la historia de la informática. A diferencia de las computadoras de la época, que usaban tarjetas perforadas y pantallas de texto monocromáticas, el Alto ofrecía un monitor gráfico de 606 por 808 píxeles, un mouse rectangular y la capacidad de abrir múltiples ventanas. Interfaz gráfica revolucionó interacción al permitir a los usuarios mover un puntero, hacer clic en iconos y arrastrar ventanas, conceptos que hoy son fundamentales. Aunque no se comercializó masivamente, Xerox distribuyó el Alto a universidades y gobiernos, sembrando ideas que transformarían la industria tecnológica.

Ethernet: Conectando el mundo

Mientras el Alto redefinía la interacción con las computadoras, otro avance ocurría en los pasillos de PARC. En 1973, Bob Metcalfe y David Boggs, inspirados por AlohaNet, una red experimental en Hawái, desarrollaron Ethernet, una tecnología que permitía conectar computadoras en una red local. Usando un cable coaxial, las máquinas compartían archivos e impresoras a 2.94 Mbps, una velocidad impresionante para la época. Redes locales transformaron oficinas con un protocolo eficiente, Carrier Sense Multiple Access with Collision Detection (CSMA/CD), que resolvía conflictos de transmisión. En 1980, Xerox, Intel y Digital Equipment Corporation (DEC) estandarizaron Ethernet a 10 Mbps, convirtiéndolo en la base de las redes modernas.

La impresora láser: Imprimiendo el futuro

En 1969, Gary Starkweather, un ingeniero de Xerox, propuso una idea audaz: usar un láser para imprimir páginas completas en un tambor de tinta. En un entorno más flexible como PARC, desarrolló un prototipo que, para 1971, imprimía una página por segundo, un logro sin precedentes. En 1977, Xerox lanzó la Xerox 9700, la primera impresora láser comercial, diseñada para empresas y bancos. Impresoras láser democratizaron impresión al integrarse con redes Ethernet y el Alto, sentando las bases para la publicación moderna. Empresas como HP y Canon capitalizaron esta tecnología, mientras que Xerox no logró dominar el mercado.

Smalltalk: El nacimiento de la programación orientada a objetos

El software también fue un pilar en PARC. Alan Kay soñaba con el Dynabook, una computadora portátil para niños que fomentara el aprendizaje interactivo. Aunque este sueño no se materializó, dio origen a Smalltalk, un lenguaje de programación revolucionario. Lanzado en 1972 y estandarizado como Smalltalk-80, este entorno gráfico trataba todo como un objeto, desde botones hasta ventanas. Programación orientada a objetos influyó en lenguajes como C++, Objective-C, Java, Python y Ruby. Además, Smalltalk introdujo las ventanas superpuestas, un concepto que Apple adoptaría, mientras Xerox optó por un diseño más rígido en su producto comercial, el Xerox Star.

Copiar, cortar y pegar: Un legado universal

Larry Tesler, otro genio de PARC, desarrolló los comandos universales de cortar, copiar y pegar mientras trabajaba en el editor Gypsy para el Xerox Alto. Estos comandos, presentados en 1974, permitían a los usuarios manipular texto de forma intuitiva. Comandos universales simplificaron edición al estandarizar acciones que hoy son omnipresentes en cualquier sistema operativo. Tesler llevaría estas ideas a Apple, donde fueron clave en el desarrollo de la Macintosh. Aunque Xerox no capitalizó estos comandos, su impacto en la productividad y la usabilidad es innegable.

La paradoja de Xerox: Innovación sin liderazgo

A pesar de sus invenciones, Xerox no logró traducir las innovaciones de PARC en dominio comercial. En 1979, un acuerdo permitió a Steve Jobs visitar PARC, donde quedó fascinado por la interfaz gráfica del Alto. Apple tomó estas ideas y las convirtió en productos exitosos como la Lisa y la Macintosh. Microsoft siguió un camino similar, adaptando conceptos de PARC para Windows. Además, ingenieros como John Warnock y Charles Geschke, frustrados por la falta de visión comercial de Xerox, fundaron Adobe y desarrollaron PostScript y el PDF. Xerox perdió liderazgo tecnológico al no priorizar la comercialización, mientras competidores más ágiles capitalizaban sus ideas.

El impacto duradero de PARC

El legado de Xerox PARC trasciende sus fallos comerciales. Sus invenciones, desde el Alto hasta Ethernet y Smalltalk, definieron la informática moderna. Sin embargo, Xerox enfrentó una fuga de talentos que debilitó su posición. En 2023, donó PARC a SRI International, la organización que inventó el mouse en los años 60. En 2025, Xerox adquirió Lexmark por 1.5 mil millones de dólares, buscando fortalecer su posición en el mercado de impresoras, pero sus ingresos reflejan un enfoque en la supervivencia más que en la innovación. PARC moldeó tecnología moderna, pero su historia es un recordatorio de que las ideas revolucionarias requieren una estrategia comercial para prosperar.

Conclusiones

Xerox PARC fue un faro de innovación en los años 70, un lugar donde la creatividad y la visión humanística dieron forma al futuro de la tecnología. El Xerox Alto, Ethernet, la impresora láser, Smalltalk y los comandos de copiar y pegar son testimonios de un laboratorio que pensó en el usuario final antes que en el lucro inmediato. Sin embargo, la incapacidad de Xerox para comercializar estas ideas permitió que empresas como Apple, Microsoft y Adobe cosecharan los frutos de su trabajo. La historia de PARC es una lección sobre la importancia de equilibrar la innovación con una visión estratégica. Cada vez que usamos una interfaz gráfica, conectamos un cable Ethernet o imprimimos un documento, estamos tocando un pedazo del legado de PARC, un héroe silencioso que imaginó el mundo digital que hoy damos por sentado.